Una rutina Peculiar- 31 de marzo 2025

 

Clara es una joven muy organizada, tanto que tiene su rutina diaria perfectamente calculada. Cada mañana, su despertador suena a las 7:00 en punto, pero, curiosamente, Clara tiene un pequeño ritual: necesita saludar al cactus que tiene en su mesita de noche. "¡Buenos días, Spike!", dice mientras lo rocía con agua. Después de eso, está lista para levantarse.

Una vez en la cocina, Clara siempre prepara el mismo desayuno: una tostada con mermelada de fresa y un café con leche. Sin embargo, un día se llevó una sorpresa al descubrir que alguien había cambiado la mermelada por mostaza. Mientras intentaba entender quién pudo haber hecho esa travesura, su gato Mimo apareció con la tapa del frasco en la boca. "¡Mimo, otra vez!", exclamó Clara.

Después de ese caótico desayuno, Clara sigue con su rutina habitual. Se prepara para el trabajo, se pone sus auriculares y sale a caminar hacia la oficina mientras escucha su podcast favorito sobre plantas. Al llegar al trabajo, Clara se presenta ante el nuevo compañero: "Hola, soy Clara. Me gusta la rutina y los gatos, aunque a veces Mimo me hace la vida un poco complicada." Su compañero se ríe y le cuenta que también tiene un gato llamado Rayo que suele esconder las llaves de su coche.

Ambos descubren que tienen mucho en común, especialmente sus mascotas traviesas.Durante el almuerzo, Clara y su nuevo amigo, Javier, intercambian historias sobre sus gatos y sus peculiares hábitos. Javier cuenta cómo Rayo siempre se sube a la estantería cuando está trabajando desde casa, mientras que Clara le explica que Mimo tiene la costumbre de "organizar" los objetos de la cocina a su manera. Ríen al darse cuenta de que sus gatos, a pesar de ser diferentes, tienen algo en común: les encanta romper la rutina de sus dueños.

Esa tarde, Clara vuelve a casa y encuentra a Mimo jugando con una caja vacía. Después de un día lleno de imprevistos, decide cambiar su rutina: en lugar de cenar lo de siempre, prueba una nueva receta y dedica unos minutos a relajarse leyendo un libro sobre gatos y sus travesuras. Antes de acostarse, saluda nuevamente a Spike y sonríe al pensar que, a veces, romper la rutina también puede ser divertido. Al final, decide que al día siguiente invitará a Javier a tomar un café para seguir compartiendo anécdotas gatunas.